Con la llegada de las ferias y las romerías, es imprescindible tener las botas camperas perfectas.

Para ello os traemos unos consejitos para lucirlas como nadie:

En primer lugar es importante tener en cuenta el tipo de material de la bota, sabiendo esto… ¡comenzamos!

Si tus botos son de piel grasa deberás quitar primero todo el polvo o las posibles manchas con un paño húmedo y jabón neutro o con un cepillo con las púas blandas.

Déjalo secar a temperatura ambiente y sin darle el sol, para que no pierda color.

Cuando estés seguro de que estén secos, coge los botos y aplica grasa de caballo con un paño seco y limpio y extiéndelo por toda la superficie. Si haces este proceso después de usar tus botas camperas en una romería o feria conseguirás mantener su color y textura en perfecto estado.

Si tus botas son de piel con brillo, podrás realizar el mismo proceso pero en vez de aplicar la grasa de caballo deberás utilizar una crema incolora o del mismo tono que la piel. Para terminar lo mejor será pasar un cepillo de cerdas blandas que esté seco y limpio y así conseguirás que saque su brillo correspondiente.

Por último, si tus botas son de piel vuelta o serraje puede ser algo más elaborado.

Realiza el mismo proceso anterior (limpieza de manchas + secado) pero para ayudarte con la eliminación del polvo lo mejor será que utilices un cepillo con cerdas de goma y rocíes un poco de producto para ante, tendrá un acabado espectacular.

Y con tus botas camperas perfectas, sólo falta que las disfrutes. Y si todavía no tienes las tuyas... ¡en Azahara te esperan! 

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